El verano se acabó, pero los recuerdos nadie nos los quita.

Playa, piscina, pantano, río... cualquier metro cuadrado con agua mas o menos limpia se convierte en el escenario de los principales momentos del verano.

Si a eso le añadimos las terracitas, los helados, los amigos y los viajes tenemos el combinado perfecto para unas vacaciones deluxe.

Y es que este año la economía del pais se ha visto reflejada en las vacaciones de la mayoria y yo... la verdad es que yo tenia un verano prometedor; una semanita en el yate, quince días de compras en NY, unos días de descanso en mi isla privada en un lugar paradisiaco... peeeero como soy tan solidaria me parecía feo darme tal homenaje así que he decidido optar por un verano "low cost". (Creo que no ha colado

¿Verdad?) jajaja

Pues sí, este año la cosa no estaba como para tirar cohetes pero me he negado a amargarme pensando en la prima de riesgo, nuestro amigo el IVA y nuestros maravillosos políticos, así que he disfrutado del verano sin gastar un pastizal.

Y como ya tocaba volver por estos mundos a los que he echado de menos la verdad, he pensado que nada mejor para volver que compartiendo con vosotros mi verano.

Y como una imagen vale mas que mil palabras, ahí van: 

Piscina
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Podrán quitarnos el curro, podrán subirnos el IVA pero jamas podrán quitarnos GORRONEAR, porque todo el mundo tiene un primo, amigo, novio o compañero de trabajo con piscina, así que yo no iba a ser menos, he aprovechado la piscina, de hecho seguiré haciendolo hasta que caigan chuzos.

Pantano
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He descubierto que a 20 minutos de mi casa hay un pantano, pero no el típico pantano que entras y parece que las arenas movedizas se apoderan de tu cuerpo, si no un pantano con agua limpia, rodeado de unas vistas increibles y en el que no estas amontonado como latas de sardinas. Otro sitio en el que he disfrutado este verano y por un precio de 0€. 

Playa:

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Y sí, pude ir a la playa, porque un verano sin playa... no es verano. No logro entender la gente que no le gusta la playa, es como si alguien me dijera que no le gusta el chocolate, esa gente no es de fiar; os lo digo yo XD, a mi solo hay una cosa de la playa que me incomoda y es la arena que se me mete por sitios que ni siquiera sabía que existian, por eso cuando fui a Almuñecar vi el cielo abierto, una playa sin arena! Eso sí piedras para aburrir, pero yo lo prefiero.

Caprichos para el paladar:
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Qué sería del verano sin los caprichos culinarios, la verdad es que no entiendo como puedo comer tanto y engordar tan poco, pero adoro comer y para mi un verano no es completo sin unas buenas comidas.

Y como no quiero aturdiros con tanto verano de golpe, mañana la segunda parte de mis vacaciones, conocí Granada, no había estado nunca pero me encantó y os recomiendo a las que no lo conocéis que vayáis.

¿Qué tal vuestro verano? ¿Habéis preferido vacaciones Low Cost a vuestra isla privada?

¡Besos a todas!